¿Crees que se nota la diferencia cuando los helados se hacen con auténtica leche, frutas naturales y chocolate de calidad? Deberías probar el nuestro. Hacer un buen helado es una tarea artesanal que requiere paciencia, atención, experiencia y hasta cierta chispa de sensibilidad. Para quienes gustan de las nuevas experiencias, proponemos sabores inesperados, como los helados de violetas o rosas. Para quienes gustan, en cambio, de las tradiciones: el helado más cremoso, como el de dulce de leche o chocolate. Y lo servimos como a vos te gusta: un cono tan alto que llega hasta el cielo.